martes, 30 de julio de 2013

Reseña #2: Waiting For You - Shey Stahl

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Bailey Gray está cansada de su perfecta vida planificada.
Todo sobre su vida ha sido organizado y vivido por las expectativas puestas por su padres. Es la mejor estudiante de la clase, tiene notas perfectas, los amigos perfectos, un novio perfecto, la vida básicamente perfecta... o así piensan todos.Es entonces cuando se da cuenta que la trayectoria prevista no siempre es el camino elegido.En el día de su graduación ella toma decisión. Una que cambia todo lo que pensó que sabía acerca de su destino futuro.En un capricho, ella huye con el rebelde de la ciudad, Dylan Wade, en busca de lo desconocido.Dylan Wade no está tratando de huir de nada.Él sabe lo que quiere y ha estado esperando por años.En una lucha por encontrar lo desconocido, descubren una amistad que una vez conocieron a lo largo de la carretera y sin ninguna preocupación en el mundo. Entre las líneas amarillas y blancas del asfalto en el caliente verano, una chispa les reúne mientras el pasado de Dylan y el futuro de Bailey intentan separarlos. ¿Podría ser que Dylan y su GTO sean exactamente lo que ella necesita en su vida perfectamente planificada?



Este libro es encantadoramente delicioso. Es decir, observa esta ecuación: Chico perfecto + cámara fotográfica + diferentes carreteras de Estados Unidos. ¿Qué mejor que esto para una chica?

Les advierto que la reseña será un tanto… extensa. Me gusta explayarme libremente. 

Bailey Gray tiene una vida perfecta. Exacto perfecta para el punto de vista de toda la ciudad de Tumwater. Para todos excepto para ella. 

Nada en su vida es al azar producto del destino, por decirlo de alguna manera. Sus padres son el mismo destino. Ellos planearon toda su vida desde que nació. Bailey siempre hizo lo que ellos querían aunque esas decisiones rompieron su alma en pedazos. Como alejarse de Dylan Wade. 

El día de la graduación, Bailey no soporta más su vida como está y da un digno espectáculo de ver frente a todos y, de alguna manera termina dentro del auto de Dylan con quien no cruzaban palabra desde hacía ocho años. Exacto, ocho malditos años. Son vecinos, van a la misma escuela y si bien, en ese tiempo, siempre hubo miradas y sonrisas secretas nunca fueron lo mismo que solían ser, desde que se conocieron a los tres años de edad hasta los diez, ya que por la perdida de su madre, Dylan se volvió un chico rebelde y siguió el mal camino. Claro está que para la perfecta familia de Bailey aquello no era aceptable así que la obligaron a alejarse durante todo ese tiempo, y ahora ambos se encuentran juntos. En el mismo auto de colección que pertenece a Dylan.

El sexy chico músico con sus muchos tatuajes, ojos azul hielo y media sonrisa infartarte junto a Ojos Marrones, (Dylan le dio ese apodo a Bailey a los tres años de edad. ¿No es dulce?) Emprenden un viaje por las carreteras de Estados Unidos, viajando de ciudad en ciudad. 

Durante el trayecto logran ir conociéndose más el uno al otro ya que si bien ambos lo hacían, los últimos años de estar sin comunicación entre ellos, los convirtieron en perfectos desconocidos, de alguna manera.
A medida que leemos vamos viendo diferentes facetas de cada uno y página tras página mejora y ambos van aprendiendo a amarse de nuevo hasta que un secreto destruye todos sus momentos.

Muy bien, eso en cuanto a la historia. Ahora los personajes.

Bailey es una chica que me agradó pese a sus inseguridades, que son comprensibles. Nunca actuó por si misma (Ni su propia ropa interior podía comprarse, lo hacía la propia madre. Si, horroroso.) y cuando decide irse con Dylan continua dudando pero siempre trata de convencerse de que lo que está haciendo es lo correcto. O tal vez no, pero es lo que ella misma quiere. Cuando más personajes van apareciendo, ella siempre termina contando sobre su escapada y yo logro ver que eso es porque se siente orgullosa de que por fin hace algo por que quiere, sin que nadie la obligue a hacerlo. 

Sí, hubo momentos en los que me parecía exasperante y medio tonta. Es decir… ¿Es en serio, Bailey? Date cuenta de lo que haces. Ya verán a lo que me refiero. 

Si hablamos de Dylan Wade *suspira con una sonrisa* <Lo que quiero ya no importa una mierda. Lo que ella quiere importa.>

Dylan es, al igual que su hermano mayor y tío, músico pero no ese tipo de músicos que solo se preocupan por llenar estadios y ganar millones gracias a una discográfica. No. Dylan toca y canta porque lo ama y no lo hace porque quiera ganarse la vida con ello, lo hace porque eso es su vida.

Este chico, cubierto de tatuajes y con algún que otro piercing, sonrisa matadora y ojos increíbles, roba corazones. Sabemos, por Bailey, que es un rebelde sin causa pero todo lo que vamos a ver son momentos dulces…
–No me hagas eso. No hagas eso. No me trates como si yo fuera un idiota por tratar de protegerte de las cosas que pueden hacerte daño.

 –Cuéntame un secreto, Dylan, algo que nunca le hayas dicho a nadie.


–Te amo.
…y divertidos.
 –Nunca te besaré de nuevo si no escupes esa mierda ahora –Dijo Dylan. Inmediatamente baje la ventana y escupí el chicle. No dijo nada sino que sonrió, un poco y aunque la luz era tenue, era notable.

(Exceptuando algunas partes donde vemos que tan rebelde puede ser: –Acércate a mi chica otra vez y yo malditamente te mataré.)

Además es modesto y tímido cuando Bailey le hace preguntas acerca de sus antiguas “amigas”, como Dylan les diría. Eso es lindo viniendo de un tipo duro como él. No presume sus anteriores conquistas.

SPOILER:
–Esa chica siempre será mía. –Me señaló con un aviso en sus ojos inyectados en sangre–. Puedes llevártela, pero no puedes tomar mis recuerdos. Puedes llevarte a mi mamá, a Bailey, a mi vida, ¡Pero están mis recuerdos! –gritó hasta que su voz cedió y luego lloró.
Me rompió el corazón cuando Dylan llora. Cuando Dylan llora delante de Bailey emociona pero cuando lo hace delante del padre de ella (Que en mi opinión es un idiota) rompe tu corazón. 

FIN DEL SPOILER.


Y para finalizar

Es una historia donde el amor siempre estuvo ahí entre los personajes. Ambos lo saben. Se amaban antes de que se dieran cuenta. Desde aquel primer beso a los siete años, y puede que desde antes también. 

Me encanta que los personajes estén la mayor parte de los libros compartiendo momentos (Oh, si *guiño* Dylan me influencio) y creo que era necesario lo que pasó ya que hizo a Bailey crecer y conocerse a sí misma y a Dylan también. Ese verano los cambió a ambos. 

El libro es muy entretenido y merece un tiempo para ser leído. Tiene bastante romance, pasión y lujuria, celos, mentiras y verdades, y mucho amor, pero por sobre todo muchos momentos

¿Qué harías por un pedazo de para siempre? ¿Qué harías para amar más, sentir más y vivir más?

Waiting for you: Lectura recomendada.


4/5



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